¿Qué es un Sitio Web?

Pues en dependencia de la perspectiva que uses, puede ser una de las siguientes opciones o la combinación de las tres:

  • Como entidad físico-virtual, es un conjunto conformado por códigos de programación, imágenes y textos, que al interactuar entre ellos crean una entidad específica que incluye diversas páginas web y que es accesible a través de Internet.
  • Como plataforma digital, es la integración de temas y plugins / widgets (pedazos o segmentos de software que aportan funcionalidades específicas) dentro de un Sistema de Administración de Contenidos (o CMS por sus siglas en inglés), -que es la opción más común,- o programado a la medida usando HTML y otras herramientas o lenguajes de programación y diseño web.
  • Como herramienta de negocios, pues es la célula principal básica de tu presencia digital.

Antes de la “WWW“, cuando alguien quería referirse a un negocio o proyecto pobre y sin mucho éxito, la gente decía: “ni siquiera aparece en las Páginas Amarillas“, refiriéndose a aquellos tomos enormes, de miles de páginas, que listaban los negocios con sus direcciones y teléfonos.

Hoy, la frase que sustituyó a aquella otra es: “ni siquiera tiene un sitio web“. Una vez entiendas todo lo que puede aportarte un sitio web estéticamente aceptable y operativamente funcional, no vas a querer que nadie se refiera a tí, o a tu proyecto, de esa manera.

Ya sea que tengas un negocio propio, que quieras promover productos o servicios de la compañía o tuyos como trabajador por cuenta propia, o que abogues por una causa determinada, vas a necesitar de un espacio digital personalizable que trabaje para ti las 24 horas del día y los 365 días del año.

Cuan profesional es ese espacio, depende de si lo conformas por tu cuenta o con la ayuda de familiares y amigos, o si lo pones en manos de profesionales del tema. Por lo contrario de lo que mucha gente piensa (o algunos te dicen para abusar de tu presupuesto), la segunda opción no tiene que ser ni cara ni engorrosa, lo cual hemos demostrado fehacientemente con los proyectos de Web Latina.

¿Puedo Hacerlo y Mantenerlo Yo Mismo?

La respuesta corta es que sí. Claro que puedes. Uno puede hacer casi todo lo que se propone. Sin embargo, cuando tu carro tiene un problema mecánico o eléctrico mayor, no intentas resolverlo tú, sino que vas al Taller de Autos. Y cuando tienes que extraerte una muela, pues vas al Dentista y no la emprendes tú mismo con esas pinzas viejas que tienes en el estante de las herramientas.

Un viejo refrán reza: “Zapatero a tus zapatos” y no hay dudas que, aunque todo se pueda hacer por uno mismo, las cosas complejas, las que de verdad cuentan, y las que nos pueden traer resultados vitales para la vida o los negocios, pues es mejor ponerlas en manos de especialistas, aún cuando aprender un poco del tema no sólo no molesta, sino que puede ayudar mucho.

Un sitio web no es una simple suma de páginas y formularios que se logra con constructores web baratos, de esos que hoy abundan en Internet. Un sitio web profesional es la cara digital de tu negocio, la primera impresión (y con frecuencia, la única) que muchos prospectos y clientes tendrán de tí, tu proyecto o tu causa. El equipo o la persona (incluso si eres tú), que se encargue de tu sitio web debe tener los siguientes conocimientos:

Programación y Diseño Web

  • Conocimientos de intermedios a avanzados de HTML (el principal lenguaje de Internet), Javascript y PHP, entre otros.
  • Amplio dominio del Sistema de Administración de Contenidos (CRM) a utilizar: Drupal, Joomla y WordPress entre los más importantes, siendo este último el que es utilizado por más sitios web en el mundo.
  • No basta con dominar el CRM, sino también la amplia gama de Temas, Plugins y Widgets que hacen que tu sitio funcione, deje una huella memorable y te sirva como un “presentador y vendedor” incansable 24/7. Esos elementos se actualizan con frecuencia, y al hacerlo no siempre resultan compatibles unos con otros, por lo que se necesita de un experto que determine la mejor manera de seguir logrando los mismos resultados en las nuevas condiciones.
  • Y no menos importante, aún cuando tu sitio web esté alojado (sí, porque los códigos, las imágenes y textos tienen que “vivir” en algún lugar) en un servidor gestionado por sus dueños, un programador web avezado sabe como lidiar con las actualizaciones del servidor, las versiones de PHP que no paran de venir una detrás de otra, la administración de recursos, y la protección ante hackers y spammers, que reviste crucial importancia si no quieres que te hagan blanco de sus canalladas.

Marketing

  • Algunos programadores y diseñadores web (como los nuestros en Web Latina) se dieron cuenta que requieren también de conocimientos especializados de la otra cara de la moneda: la conexión con tu mercado objetivo, y la administración de las relaciones con los clientes (conocida como CRM), que no se limita al sitio web, pero si las cosas se hacen bien, este puede ser la base del éxito en ese campo.
  • Un experto web hoy necesita tener al menos un conocimiento básico de las estrategias de marca y, por supuesto, conocer cómo optimizar los sitios para que los motores de búsqueda te encuentren (lo que se conoce como SEO), pues de nada vale un sitio muy bello y que nadie lo conozca.
  • El experto que necesitas tiene que saber manejar múltiples palatformas (Google y Bing / Yahoo, Facebook y las demás redes sociales, WhatsApp… etc.) y las más variadas herramientas, tanto de diseño como de marketing, que les permita no sólo implementar estrategias, sino también medirlas, evaluarlas, y mejorarlas.
  • Para que tu web sea efectiva y cumpla su cometido, hay que dedicar tiempo y expertise al diseño de los mensajes, a los flujos de tráfico de tus visitantes a través de tu sitio, a los imprescindibles Llamados a la Acción (o CTA en inglés), y a decenas de muchas más cosas que son las que generan el impacto. ¡Y las ventas!

Viendo todo esto así, te estarás imaginando que es muy costoso contar con un equipo o un experto que haga todo eso por tí y que está al alcance sólo de las medianas y grandes empresas.

¡Ya no más! Y si sigues leyendo el último bloque de este artículo, te lo podemos demostrar.

¿Quieres un Sitio Que Haga la Diferencia?

La pregunta del encabezado de este bloque final es pura retórica. ¡Claro que quieres un sitio que haga la diferencia, que te ayude a posicionar tu marca, tus productos o servicios, y que te genere más ventas! Si no, ¿Para qué invertirías un dólar o un minuto de tu tiempo (que es aún más valioso) en ello?

Y la mejor forma de lograrlo es mediante un esfuerzo mancomunado. Por una parte, tienes que usar los servicios de expertos, en particular de aquellos que se especializan en pequeños negocios y saben que no es que no quieras pagar, sino que no dispones de suficiente presupuesto. Y entonces acuerdan contigo estrategias de crecimiento conjunto, gracias a las cuáles te cobran muy poco y se benefician de verdad sólo si tu negocio crece y triunfa. Esos expertos no son simples “proveedores” de servicios. Son aliados tuyos y de tu proyecto, siendo parte de un destino compartido, pues sólo les irá bien si a tí te va bien.

Por otra parte, debes aliarte a expertos que no sólo te hagan un trabajo profesional, actualizado, dinámico y muy creativo, sino que también te ayuden a aprender, a poder hacer cosas por ti mismo sin que tengas que esperar por la disponibilidad de alguien, y mucho menos pagarle a alguien por cada pequeña cosilla que necesites hacer o cambiar.

En nuestra experiencia de casi 15 años diseñando sitios web de avanzada y estrategias de marketing y posicionamiento ganadoras, sólo esa COMBINACIÓN es capaz de HACER LA DIFERENCIA.

Algunos motivadores te “enganchan” diciendo que “sólo el cielo es el límite” y eso no es cierto. Claro que hay límites: el presupuesto es un límite, la competencia es un límite, el estado de la economía local o global es un límite. Hay límites. Lo que no hay son IMPOSIBLES.

Siendo realistas, creativos, perseverantes y contando con los aliados correctos y las herramientas correctas, hasta lo “imposible” (que usualmente sólo es aquello que tarda un poco más) puede conseguirse y acelerarse. ¡Pruébalo y nos cuentas!